Libertad

(Editorial de Nuestra Propuesta del jueves 11 de diciembre de 2008)

El papa Ratzinger ha hablado acerca de la libertad creada y, en consecuencia, abusada por parte de los seres humanos, lo que sería la razón de los males del mundo, e incluso critica en el mismo mensaje la voluntad de los políticos que se proponen cambiarlo. Como la Iglesia es parte no menor del sistema mundial de dominación, y esos mensajes ponen de manifiesto sus orientaciones, en el contexto de la crisis mundial, es bueno ver para dónde disparan.

Por esta razón, los gobiernos que en medio de la incertidumbre económica y financiera global actúan con independencia, y viene al caso la decisión del presidente Correa de Ecuador de no pagar la deuda ilegítima de su país, están en el buen camino, a pesar del senador Pichetto que acaba de decir que Argentina debe pagar la deuda porque no es una «república bananera» como sería Ecuador.Resulta que un país soberano esuna «república bananera» y Argentina ha de pagarle deuda a una banda de delincuentes especuladores financieros, los famosos bonistas, cuyo abogado Marc Dreir, acaba de ser apresado por estafador en EE.UU. Este no es el buen camino.

Y sí se trata de cambiar el mundo. En la agenda política que se avecina, los cincuenta años de la evolución Cubana han de ser el rasgo distintivo del próximo año encuadrando el debate sobre el poscapitalismo en nuestra región latinoamericana, animada por procesos variados en cada país, con una impronta antimperialista, tal como han coincidido los partidos comunistas en la reciente reunión de San Pablo.

En la agenda nacional, a 25 años de la instauración de gobiernos constitucionales, se presenta la cuestión de una verdadera alternativa política de cambio como el acuciante problema no resuelto. Más aun cuando la crisis de representación y gobernabilidad actúa de continuo.

Las cuentas pendientes de estos años de gobiernos constitucionales son numerosas, y van desde la lentitud de los juicios por el Terrorismo de Estado hasta la distribución de la riqueza.Como ejemplo se puede citar la campaña necesaria por la liquidación de leyes de la dictadura como es el caso de la Ley de Radiodifusión, o el proyecto presentado por el Partido Comunista de derogación de una ley aprobada a instancias de los organismos financieros internacionales por el gobierno Kirchner, como lo es la Ley Antiterrorista.

También se cumple el primer año de gobierno de la gestión Cristina Fernández, marcado en primer lugar por el conflicto del «campo», que ante el tímido intento de intervenir desde el Estado en la economía sufrió la fuerte arremetida de las organizaciones agrarias de la oligarquía, las derechas y la desgraciada participación de la FAA, con enorme apoyo mediático; otros elementos distintivos del gobierno, la reestatización del sistema previsional, que fue tratada desde los medios masivos como un despojo a la propiedad privada, y los paquetes antirrecesivos, aun en sus limitadas dimensiones, son fuertemente resistidos por una oposición que busca alinearse a la derecha.

Para los sectores populares el desafío es impedir los despidos, el cierre de empresas, luchar contra la carestía de la vida, por la distribución de la riqueza y lograr en ese camino agrupar fuerza política popular que los represente.

Estos han sido los temas que llegarán al congreso comunista esta semana, el denuedo puesto en los trabajos congresales y la voluntad de contribuir a ese objetivo, ya marcan el clima político de ese encuentro.